El aislamiento térmico de la inmensa mayoría de nuestras viviendas y oficinas es deficitario, a no ser que sean de nueva construcción. Se calcula que alrededor de 6 millones de edificios tienen más de 50 años y su calificación energética es tipo E, lo que significa poca eficiencia energética y un alto consumo energético.

Además de suponer un gasto elevado, un mal aislamiento térmico repercute en el confort de las personas que están dentro del edificio, la temperatura a penas se conserva dentro del edificio, escapándose por las ventanas principalmente, también por las paredes, rendijas o cristales, por lo que en invierno hace falta poner más calefacción y más aire acondicionado en verano, para tener una temperatura agradable.

Aunque lógicamente, realizar una rehabilitación energética produce un coste inicial, se comienza a ahorrar en la factura de la luz desde que tenemos el edificio adecuadamente aislado, amortizándose la inversión de la rehabilitación energética en unos 5 años. Con la rehabilitación energética rebajamos el consumo energético de casas y oficinas y sin duda la recomendación de Efitech es que sobre todo si se va a realizar alguna obra en el edificio, se haga dicha reforma con profesionales que tengan en cuenta los criterios energéticos para disminuir el gasto de energía y se haga a su vez un trabajo de aislamiento del edificio, renovando los acristalamientos, eliminando puentes térmicos, aislando tanto el interior como el exterior del edificio, mejorando la estanqueidad, así como otras cuestiones que los profesionales de la eficiencia energética siempre tienen en cuenta para mejorar la calidad de vida y ahorrar en las facturas de la luz.

Contacta con profesionales como Efitech para proceder a la mejora del aislamiento térmico, te aconsejaremos la mejor forma de proceder en cada caso, identificando las necesidades concretas de tu vivienda o de tu oficina. Lo primero que averiguamos es por dónde se dispersa la energía de tu oficina o vivienda, ya que puede ser por las paredes, por los tejados, por las ventanas, etc. te asesoramos sobre las ventajas que tendrás de cara a reducir la factura de la luz y obtener un ambiente agradable sin necesidad de gastar más de a cuenta y de contaminar la atmósfera.

Implementar en tu oficina un plan de ahorro y eficiencia energética nos ayuda a reducir el consumo energético y las emisiones contaminantes de CO2, y todo ello comienza con una revisión del consumo energético.

Las formas de proceder más habituales en cuanto a aislamientos de fachada se refiere son o bien reforzar la envolvente del edificio por la parte exterior, aislar térmicamente la casa u oficina por el interior con materiales aislantes como lana mineral,  o espumas flexibles. También es muy habitual sustituir las ventanas por unas de doble cristal que son más eficientes.