Los ayuntamientos han notado las ventajas que supone tomar medidas de eficiencia y ahorro energético, o contratar electricidad procedente de energías renovables. Según los datos que se maneja, Madrid está en disposición de ahorrar un 5 por ciento en su factura mientras que Zaragoza puede lograr ahorrar un 16’6 por ciento y Valencia busca un ahorro mínimo del 12 por ciento para el año 2020. Empezaremos hablando del caso del Ayuntamiento de Madrid, ya que los edificios municipales y los equipamientos del Ayuntamiento recibirán energía procedente completamente de fuentes renovables y de cogeneración de alta eficiencia. Para ello desde el Ayuntamiento han firmado un acuerdo de suministro de energía 100% verde con Endesa.

En total abastecerán de 171 GW hora de energía 100% verde durante 2017 a unos 1.150 puntos de Baja Tensión y 190 de Media Tensión del Ayuntamiento de Madrid como son la Agencia para el Empleo, la Agencia Tributaria y Madrid Salud. Por otro lado, Córdoba, Zújar, La Carlota y Paterna son cuatro de los casos ejemplares de ayuntamientos andaluces que son de los primeros en aprovechar las oportunidades de consumir solo energías renovables e impulsar indirectamente este sector. En el caso de Córdoba se abastece de electricidad proveniente de renovables por ejemplo su monumento más emblemático, la Mezquita Catedral.

Por otro lado, la estrategia del Ayuntamiento de Zaragoza, que va a ahorra en su factura energética un total de 5.645.125 euros en los suministros de gas y electricidad durante los próximos dos años. Y es que Energy House ha colaborado con el Consistorio aragonés en el proceso de licitación de los suministros de electricidad y gas de todas las dependencias municipales. El resultado es un ahorro del 16’6 por ciento respecto al precio actual de suministro, el adjudicatario ha sido Gas Natural Fenosa. Y es que cada vez más ayuntamientos se suman a la eficiencia energética para ahorrar en sus facturas.

Por último os hablaremos del plan de ahorro energético de la Generalitat Valenciana, en el que establece un objetivo de ahorro energético mínimo global del 12 por ciento en 2020 y del 25 por ciento en 2025. También quieren lograr que los edificios existentes con consumo energético superior a 200.000 kW por hora y año deban mejorar su calificación energética antes del año 2025, para lo que han establecido un programa de auditorías energéticas. Asimismo, el Plan establece que en el plazo de un año los edificios, infraestructuras y equipamientos que cuenten con grandes consumos energéticos deberán incorporar una transmisión de datos telemática desde los puntos de consumo.